Una catastrófica emergencia humanitaria se está desarrollando en un campo para personas internamente desplazadas (IDP) en el Estado de Borno, en Nigeria.
Durante varias horas del pasado 21 de junio, un equipo de Médicos Sin Fronteras (MSF) logró acceder a la ciudad de Bama en el noreste de Nigeria, en donde 24.000 personas, incluyendo a 15.000 niños —de los cuales 4.500 son menores de 5 años—, se encuentran refugiados en un campo ubicado en un complejo hospitalario. Durante esas horas, el equipo médico de MSF se encontró con una importante crisis sanitaria, y refirió a 16 niños severamente desnutridos que estaban en riesgo de muerte inmediata al departamento de pacientes internos del centro de alimentación terapéutica de MSF, en Maiduguri. Una evaluación rápida sobre la situación nutricional de más de 800 niños demostró que 19% de ellos sufría de desnutrición severa: la forma más mortal de la desnutrición.
“Ésta fue la primera vez que MSF logró acceder a Bama, pero ya sabíamos que las necesidades de la población eran más que críticas” afirmó Ghada Hatim, jefe de misión de MSF en Nigeria. “Estamos atendiendo a niños desnutridos en instalaciones médicas en Maiduguri, y vemos el trauma en los rostros de nuestros pacientes que han sido testigos y han sobrevivido a muchos horrores.”
El equipo de MSF contó 1.233 tumbas que se encuentran cerca del campo y que han sido cavadas en el último año. Muchas de esas tumbas —480—, pertenecen a niños.
“Bama está, en gran parte, cerrada” dijo Hatim. “Nos han dicho que la gente en ese lugar, incluyendo a los niños, están muriendo de hambre. De acuerdo con los testimonios que las personas desplazadas en Bama han proporcionado a MSF, diariamente aparecen nuevas tumbas. Nos contaron que, en ocasiones, más de 30 personas han muerto en un día a causa de la hambruna y las enfermedades.”
Desde el 23 de mayo, al menos 188 personas han fallecido en el campo —casi 6 por día—principalmente de diarrea y desnutrición.
Entre el 13 y el 15 de junio, las autoridades nigerianas y una ONG local organizaron la evacuación de 1.192 personas que requerían atención médica, del área de Bama a la ciudad de Maiduguri, capital del Estado de Borno. Este grupo, compuesto principalmente por mujeres y niños, se instaló en el “Camp Nursing”, para personas internamente desplazadas. De los 446 niños examinados por los equipos médicos de MSF en este campo, 66% estaban desnutridos y 39% padecían una forma severa de desnutrición. Tras la evaluación, 78 niños tuvieron que ser hospitalizados inmediatamente en el centro de alimentación terapéutica de MSF, que tiene capacidad para 86 camas.