Hoy comienza la primera reunión a nivel ministerial sobre inmunización en África que se desarrollará durante dos jornadas en Addis Abeba, Etiopía. Médicos sin Fronteras (MSF) expresa su consternación porque una cuestión clave como los precios desorbitados de las vacunas no esté en el orden del día de la cita. Y esto sucede a pesar de que los costes de las vacunas son una de las principales barreras para la protección de los niños contra las enfermedades más letales.
«Hemos tenido problemas para introducir nuevas vacunas en nuestros proyectos a causa de su alto precio. Resulta frustrante no poder proporcionar algunas de las vacunas más esenciales para nuestros pacientes debido a que sus precios quedan fuera de nuestro alcance o no están disponibles en la cantidad que se requieren. Y escuchamos la misma frustración por parte los gobiernos en diversas discusiones globales”, afirma el Dr. Myriam Henkens, coordinador médico internacional de MSF. «Si los precios de las vacunas continúan fuera de control, vamos a seguir viendo como estados africanos y de todo el mundo se enfrentan a decisiones difíciles sobre ante qué enfermedades mortales pueden permitirse el lujo de proteger a sus hijos y ante cuáles no. Los ministros que participan en esta conferencia no pueden perder esta oportunidad para levantar la voz en contra de los precios de las vacunas e impulsar un cambio«.
El año pasado, MSF publicó su informe sobre precios de las vacunas: ‘La mejor vacuna, por un acceso sin barreras a vacunas’. Mostraba que en la mayoría de los países africanos, con la incorporación de nuevas vacunas al paquete completo de inmunización, resulta 68 veces más caro vacunar a un niño ahora que en 2001. En un futuro cercano, muchas partes del continente no podrán pagar las nuevas vacunas que tienen un precio muy alto como sucede con la vacuna contra la neumonía. Por ejemplo, cuando Angola pierda el apoyo de los subsidios de la Alianza Global para la Vacunación y la Inmunización (GAVI) se enfrentará a un brutal encarecimiento del precio de las nuevas vacunas y pagará un 1.523% más en los próximos años. Congo sufrirá una subida de los precios del 801%. Otros estados africanos que no se benefician del apoyo de los donantes y que carecen de acceso a los precios más bajos negociados por GAVI se enfrentan a precios para realizar campañas de inmunización mucho más altos.
En mayo de 2015, 193 gobiernos se reunieron en Ginebra con motivo de la Asamblea Mundial de la Salud de la OMS y aprobaron, por unanimidad, una resolución histórica en la que demandaban vacunas más asequibles en cantidades adecuadas y una mayor transparencia en torno a los precios de las vacunas. Los Gobiernos de 23 países africanos subrayaron las desigualdades crecientes entre ellos a causa del aumento de la carga financiera de las nuevas vacunas. Nueve de esos países: Argelia, Egipto, Libia, Marruecos, Nigeria, Sudán, Togo, Túnez y Zimbabue auspiciaron explícitamente la resolución, el número más alto de cualquier continente.
«Después de que los gobiernos dejaran claro que quieren soluciones a los disparados precios de las vacunas, esperábamos que este tema ocupara un lugar destacado en esta conferencia«, explica Kate Elder, asesora de Políticas de vacunas de la Campaña de Acceso a medicamentos de MSF. «Escuchamos que a los gobiernos – que ya están atados con múltiples desafíos – se les pide destinar más recursos a la compra de vacunas caras sin que nadie les diga a los gigantes farmacéuticos que bajen sus precios. Se requiere una mejor dotación de recursos pero, de manera crítica, también se necesitan precios más bajos«.
La vacuna contra la neumonía es la vacuna con mayor éxito de ventas en el mundo y representa casi la mitad del precio total de inmunizar a un niño en los países africanos más pobres que reciben el apoyo de GAVI. Hasta la fecha, los dos productores de la vacuna, Pfizer y GlaxoSmithKline (GSK), han facturado más de 30.000 millones de dólares en ventas de la vacuna contra el neumococo, pero siguen negándose a bajar su precio en los países en desarrollo. Después de años de negociaciones infructuosas con las farmacéuticas para reducir el precio de las vacunas para su empleo en sus proyectos, MSF está pidiendo el apoyo de la ciudadanía a través de una campaña para ejercer presión sobre las compañías y lograr así una reducción del precio de esta vacuna a 5 dólares por niño y para las tres dosis, en todos los países en desarrollo y para las organizaciones humanitarias. La neumonía es la principal causa de muerte infantil y está detrás del fallecimiento de un millón de niños cada año en todo el mundo.
«Los médicos han visto a demasiados niños morir de neumonía, no vamos a dar marcha atrás hasta que estemos seguros de que todos los países pueden permitirse la vacuna y de que esta estará disponible«, asevera Dr. Henkens. «Hoy queremos ver que las preocupaciones de los gobiernos son escuchadas y que se adoptan medidas para presionar a las empresas farmacéuticas a bajar el precio de la vacuna del neumococo y de otras vacunas que son vitales«.
Cada año, los equipos de MSF vacunan a millones de personas, tanto como respuesta a brotes de enfermedades como sarampión, meningitis, fiebre amarilla y cólera, como parte de las actividades de inmunización rutinaria en proyectos en los que facilita atención materno-infantil. Solo en 2014, MSF proporcionó más de 3,9 millones de dosis de vacunas y productos inmunológicos. En el pasado, MSF ha comprado la vacuna antineumocócica conjugada (PCV) que se utiliza para proteger contra la neumonía en sus operaciones de emergencia. MSF está ampliando el uso de la PCV y de otras vacunas prestando especial atención a la mejora de su trabajo en las vacunaciones rutinarias y a la ampliación del paquete de las vacunas utilizadas en situaciones de emergencia. MSF ha vacunado con la PCV a niños atrapados en situaciones de emergencia en la República Centroafricana, Etiopía, Sudán del Sur y Uganda, entre otros.