MSF condena en los términos más enérgicos posibles el terrible bombardeo de su hospital de Kunduz en un momento en el que éste se encontraba completamente lleno de personal y pacientes. MSF desea aclarar que todas las partes en conflicto, incluidas las autoridades de Kabul y Washington, estaban precisamente informadas de la ubicación exacta (a través de las coordenadas GPS) de todas y cada una de las instalaciones de MSF (hospital, alojamiento de trabajadores, oficina y una unidad de estabilización externa en Chardara, al noroeste de la ciudad). Como MSF hace en todos los contextos de conflicto, estos lugares precisos se comunicaron a todas las partes en múltiples ocasiones durante los últimos meses; la notificación más reciente tuvo lugar el pasado 29 de septiembre.
El bombardeo continuó durante más de 30 minutos después de que funcionarios militares estadounidenses y afganos en Kabul y Washington fueran informados de lo que estaba sucediendo. MSF solicita que se aclare urgentemente qué ha sucedido con exactitud y cómo un hecho tan terrible ha tenido lugar.
ACTUALIZACION SOBRE LAS VÍCTIMAS DEL BOMBARDEO DEL HOSPITAL:
MSF confirma con profunda tristeza la muerte de 16 personas incluyendo nueve de sus trabajadores humanitarios, siete pacientes de la unidad de cuidados intensivos, entre ellos tres niños. Así mismo, 37 personas han resultado gravemente heridas en el ataque, de las cuales 19 son personal de MSF (5 en estado crítico). Algunos de los heridos más graves están siendo trasladados para su estabilización a un hospital en Puli Khumri, a 2 horas de distancia. Todavía numerosos pacientes y personal médico en paradero desconocido. Las cifras siguen creciendo a medida que vamos teniendo una imagen más clara de las consecuencias de este horrible bombardeo.