Ante la importante respuesta de las autoridades chilenas, MSF concentra sus esfuerzos en las áreas de más difícil acceso.
Varios equipos de Médicos Sin Fronteras (MSF) se encuentran evaluando las necesidades en las regiones de Maule y Bio Bio, las más afectadas por el terremoto de magnitud 8.8 que sufrió Chile el pasado sábado. La región dañada por el seísmo es muy amplia, con cerca de mil kilómetros de costa afectados y muchas zonas que aún no han sido evaluadas.
En líneas generales, hay una importante respuesta por parte de las autoridades chilenas, con las que MSF permanece en contacto para coordinar la ayuda. MSF se concentra por lo tanto en las zonas más aisladas, donde hasta el momento no ha podido llegar la ayuda.
Un equipo se encuentra en la región de Concepción y, en el día de hoy, iba junto a las autoridades chilenas a evaluar la situación en las zonas costeras al norte de la ciudad que hasta ahora no habían sido visitadas. Dos otros equipos están recorriendo la costa en la región de Maule, al norte y al sur de Constitución. Los equipos de MSF han visitado además los hospitales de Curicó y Chillán, donde han llegado heridos. Se les prestará apoyo en forma de material médico.
En sus evaluaciones, el personal de MSF ha podido observar importantes daños en algunas zonas, especialmente en las costas, pero no son de carácter masivo, y la mayor parte de las carreteras se encuentran en relativamente buen estado. En algunas localidades, las personas permanecen en la calle, bien porque han perdido sus casas o porque tienen temor a permanecer dentro de ellas, debido a las nuevas réplicas que se registran diariamente. Muchas localidades de la costa se han visto también muy afectadas por la ola que siguió al terremoto.
MSF está además preparando un equipo de psicólogos para prestar ayuda en salud mental, ya que nuestro personal ha visto a muchas personas traumatizadas por el terremoto y las numerosas réplicas.
El equipo de MSF ya cuenta con 14 personas: un grupo compuesto por médicos, enfermeros, logistas y un coordinador que han estado llegando desde el sábado, provenientes del propio Chile, de Argentina, Bolivia, Panamá y México.