Mientras que la ofensiva militar israelí continúa, el balance estimado de 600 muertos y 2950 heridos en solamente 11 días, alcanza proporciones alarmantes y da cuenta de una ofensiva extremadamente violenta que afecta a la población civil de manera indiscriminada. Un millón y medio de Palestinos en la Franja de Gaza, la mitad de los cuales son niños, están actualmente a la merced de las balas y los bombardeos incesantes, explica Franck Joncret, jefe de misión de MSF. ¿Quién podía creer que un ataque tan arrollador discriminaría a los civiles, imposibilitados de huir y amontonados en este enclave extremamente poblado?
La ofensiva militar ha sembrado el terror en el seno de una población urbana atrapada, y que no se atreve a salir de sus casas para recibir atención médica. Del mismo modo la inseguridad golpea a los servicios de ayuda. Personal de ayuda humanitaria y de la salud palestinos han perdido sus vidas y hospitales y ambulancias han sido bombardeados.
Los servicios de urgencia de los hospitales están más que sobrecargados. Durante los diez primeros días el hospital de referencia dAl Shaifa ha realizado más de 300 intervenciones quirúrgicas, Las seis salas de operaciones del hospital funcionan al máximo de su capacidad, practicándose en cada una dos operaciones al mismo tiempo dice preocupada Cecilie Barbou, la coordinadora médica de MSF en Gaza. Los cirujanos palestinos y el personal medico están extenuados y apenas logran hacer frente a la llegada de los heridos La mayoría de las urgencias que reciben son heridos graves y politraumatizados, principalmente con heridas en el tórax, en el abdomen o en la cara.
Los equipos de MSF presentes en Gaza, compuestos por 3 expatriados internacionales y casi 70 palestinos, intentan desde el inicio de la ofensiva sostener las estructuras hospitalarias palestinas y atender a los heridos, y ya han distribuido material médico y medicamentos a varios hospitales que se están quedando sin stock de medicamentos. Un equipo de MSF compuesto por veinte personas realiza atención médica a domicilio: cada día alrededor de 40 personas son atendidas directamente en sus casas. El nivel de inseguridad es tan alto que nuestras posibilidades de realizar desplazamientos y brindar asistencia son extremadamente limitadas, explica Jessica Pourraz, responsable de las actividades de MSF en Gaza. Lo que necesitamos es poder acceder sin impedimentos a los heridos las 24 horas, y que los propios civiles tengan la posibilidad de acceder a las estructuras de salud
Respondiendo a la demanda de los médicos del hospital dAl Shaifa, MSF va enviar un equipo quirúrgico (un cirujano, un anestesista, una enfermera instrumentadora quirúrgica), un hospital móvil dotado de una sala operatoria y una unidad de cuidados intensivos, con el fin de aumentar la capacidad para atender heridos. MSF debe conseguir las autorizaciones necesarias para que, de manera urgente, este equipo y el material médico puedan entrar en la Franja de Gaza.
En estas circunstancias, y a pesar que continúan las restricciones de entrada de personal y de materiales en la Franja de Gaza, el paro temporal de los bombardeos quizás pueda mejorar el acceso de los heridos a las estructuras de salud, los movimientos de los socorristas y el aprovisionamiento de productos vitales (gasolina, comida, material médico y medicamentos)
Sin embargo estas medidas parciales, destinadas a calmar la opinión internacional, no tienen ningún efecto sobre la violencia directa y masiva que sufre la población Constata la Dra.Marie Pierre Allié, presidenta de MSF Francia.