La intensificación de la ofensiva de las fuerzas israelíes en Rafah, provocó que dejemos de prestar asistencia vital en el Hospital de campaña Indonesio de Rafah desde el domingo 12 de mayo.
Los 22 pacientes que permanecían ingresados han sido derivados a otros centros, ya que no podíamos garantizar su seguridad.
«Desde el inicio del conflicto, hemos observado un patrón de ataques sistemáticos contra instalaciones médicas y civiles, lo cual suele traducirse en el cese forzoso de actividades en estas estructuras.
Hemos tenido que abandonar 12 centros sanitarios diferentes y hemos sufrido 26 incidentes violentos, incluidos ataques aéreos que han dañado hospitales, disparos de tanques contra refugios que estaban perfectamente identificados y desmilitarizados, ofensivas terrestres contra centros médicos, y disparos contra nuestros convoyes».
Michel-Olivier Lacharité, nuestro coordinador de emergencias
¿Qué sucede con la población civil en Gaza?
El sistema sanitario está siendo desmantelado, lo que tiene consecuencias devastadoras para la población que está atrapada en Gaza.
Según la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), 24 de los 36 hospitales de Gaza están fuera de servicio.
Estamos intentando establecer hospitales de campaña en otros lugares de la Franja, pero advierte de que estas estructuras no podrán hacer frente a una eventual llegada masiva de civiles heridos que se sume a las abrumadoras necesidades médicas que ya existen en la actualidad.
«Estos hospitales de campaña no son en ningún caso estructuras que puedan sustituir a un sistema sanitario funcional.»
Michel-Olivier Lacharité, nuestro coordinador de emergencias
La ofensiva israelí se intensifica en Rafah: cierre y bloqueo de ayuda médica
Llevábamos ofreciendo atención postoperatoria para heridos de guerra en el Hospital de campaña Indonesio de Rafah desde mediados de diciembre de 2023.
Contábamos con 60 camas y nuestros cirujanos realizaban también unas 35 intervenciones quirúrgicas a la semana. La atención hospitalaria y ambulatoria funcionaba seis días a la semana, con unas 130 consultas diarias, y nuestros equipos sanitarios realizaban cambios de vendajes, fisioterapia y asesoramiento.
El Ministerio de Sanidad también se ha visto obligado a trasladar sus actividades del Hospital de campaña Indonesio de Rafah, lo que ha provocado el cierre de todo el hospital.
Junto a este cierre, los prolongados bloqueos de la ayuda están paralizando aún más la respuesta humanitaria y poniendo en peligro la vida de las personas atrapadas en Gaza.
Los suministros de combustible, necesarios para el funcionamiento de hospitales, panaderías y otros productos de primera necesidad, se están agotando, mientras que la población sigue sin poder salir del enclave.
Por otra parte, habíamos reanudado nuestras actividades en el hospital Nasser de Jan Younis, con servicios ambulatorios y de hospitalización centrados en cirugía ortopédica, atención a quemados y servicios de terapia ocupacional, mientras que los servicios de maternidad abrirán en los próximos días.
A mediados de febrero, nuestro personal se vio obligado a cesar sus actividades en este hospital y dejar atrás a los pacientes después de que un proyectil alcanzara el departamento de ortopedia y las fuerzas israelíes ordenaran la evacuación del centro para posteriormente asaltarlo.
Gaza Hoy: ¿qué está pasando?
La población de Gaza se enfrenta a otra oleada de bombardeos, misiles, disparos y violencia. Por ello, exigimos de nuevo el cese inmediato de esta campaña de muerte y destrucción indiscriminadas, que está desplazando a cientos de miles de personas y privándolas de una ayuda que resulta esencial.
Según Naciones Unidas, al menos 360.000 palestinos han huido de Rafah desde que las fuerzas israelíes ampliaron su ofensiva y ordenaron la evacuación. Prestar asistencia humanitaria y médica vital resulta prácticamente imposible en estas circunstancias.