La situación de violencia en Sudán se sigue agravando. Desde el 15 de abril, se han producido intensos combates entre las Fuerzas Armadas de Sudán y las Fuerzas de Apoyo Rápido en Jartum y otras partes del país.
La situación sanitaria en Sudán es catastrófica
«Durante una pausa en los combates, MSF pudo hacer una donación de suministros médicos a un centro de salud de Jartum el domingo 23 de abril, y estamos en contacto con hospitales y autoridades y asociaciones médicas sudanesas para tratar de abastecer a otros hospitales y centros de la capital; sin embargo, los combates siguen haciéndolo casi imposible», declara el Dr. Ghazali Babiker, nuestro director en Sudán.
En El Fasher, un gran número de heridos han llegado al hospital que apoyamos. Nuestros equipos trabajan día y noche para tratar a los heridos. Hasta el 26 de abril, 404 personas han recibido tratamiento en el hospital, que es ahora el único centro de salud operativo en la ciudad.
Miles de personas han huido de Jartum a Wad Madani. Nuestros equipos, que incluyen personal de Jartum y de nuestro proyecto en Damazin, están evaluando la mejor manera de empezar a responder a las necesidades allí.
También estamos a pacientes en Damazin (estado del Nilo Azul), Omdurman (estado de Jartum), Kreinik y El Geneina (Darfur Occidental), Rokero (Darfur Central), Um Rakuba y el estado de Gedaref (Sudán Oriental).
Pedimos seguridad para nuestro personal y pacientes en Sudán
Seguimos comprometidos a proporcionar la asistencia sanitaria que tanto necesita la población de Sudán, especialmente en estos momentos tan difíciles. Pero para ello, necesitamos poder garantizar la seguridad de nuestro personal y de los pacientes.
«Los equipos de emergencia de MSF están listos para entrar en Sudán tan pronto como puedan para apoyar la ampliación de nuestras actividades. Otros equipos están actualmente preparándose e identificando las mejores formas de enviar suministros médicos y humanitarios al país», informa Kate Nolan, nuestra directora adjunta de Operaciones.
Tras más de una semana refugiándose de los intensos combates en Sudán, algunos de nuestros equipos se han reubicado en lugares más seguros, mientras que hay planes para que otros abandonen el país. Algunos miembros del personal también se han trasladado con sus familias a zonas más seguras, a menudo reuniéndose con familiares. Seguimos en estrecho contacto con todos los miembros del equipo, en la medida de lo posible. La seguridad de nuestro personal es una prioridad absoluta, y agradecemos el apoyo recibido para reubicar a nuestros equipos de forma segura.
«Reiteramos nuestro llamamiento a todos los que participan en la violencia para que respeten las obligaciones que les impone el derecho internacional humanitario de garantizar la seguridad del personal médico y las instalaciones sanitarias, permitir el paso seguro de nuestros equipos, ambulancias y civiles en busca de atención sanitaria, y facilitar el movimiento de quienes prestan asistencia humanitaria», declara el Dr. Abubakr Bashir Bakri, nuestro responsable de operaciones en Sudán.