Hoy, 18 de noviembre de 2023, en Gaza, un familiar de un trabajador humanitario de nuestra organización murió y otro resultó herido en un ataque contra nuestro convoy que intentaba evacuar a 137 personas, miembros de nuestro personal palestino y sus familias.
Estas personas habían estado atrapadas durante una semana en nuestras instalaciones situadas cerca del hospital Al Shifa de Gaza. Condenamos en los términos más enérgicos este ataque deliberado.
Esta mañana, a las 9:00 de la mañana hora local, un convoy de nuestra organización compuesto por cinco vehículos, todos claramente marcados con la identificación de Médicos Sin Fronteras, incluso en los techos de los coches, con 137 personas, compuesto por miembros de nuestro personal palestino y familias, entre ellos 65 niños, salieron de nuestras instalaciones (el alojamiento, la oficina y la clínica ambulatoria situada cerca del hospital Al Shifa) en dirección al sur de la Franja de Gaza hacia un lugar más seguro.
Desde el 11 de noviembre, estas personas se encontraban atrapadas bajo el fuego de los continuos combates y, desde entonces, habíamos pedido en repetidas ocasiones que fueran evacuadas de forma segura.
Nuestra organización había informado a las dos partes en conflicto de este movimiento. El convoy siguió el itinerario indicado por el Ejército israelí y llegó a la calle Salah Al Deen, junto con otros civiles que intentaban abandonar la zona.
El convoy llegó al último puesto de control cerca de Wadi Gaza, que en ese momento estaba abarrotado debido a los exhaustivos controles a la población palestina por parte de las fuerzas israelíes.
A pesar de la información compartida con el Ejército israelí, no se les permitió cruzar el puesto de control durante horas. Más tarde, nuestro personal oyó disparos que les obligaron a dar marcha atrás por miedo y a regresar a nuestras instalaciones, situadas a unos 7 kilómetros del puesto de control.
De regreso, entre las 15:30 y las 16:00 hora local, el convoy fue atacado en la calle Al-Wehda, cerca del cruce con la calle Said Al A’as, cerca de nuestra oficina. Dos de los coches de nuestra organización fueron alcanzados deliberadamente, tras lo cual murió un familiar de un trabajador y otro resultó herido.
Reiteramos nuestro llamamiento para que se permita urgentemente la evacuación de nuestro personal, así como de otros miles de personas, atrapadas por los combates y que viven en condiciones extremadamente terribles en el norte de Gaza.
Pedimos un alto al fuego inmediato como única forma para que se habiliten corredores para evacuar con seguridad a los civiles atrapados.