MSF ha enviado material de emergencia para garantizar la continuidad de la atención médica en el hospital tras el atentado con bomba del viernes.
Más de 100 heridos han sido asistidos en el Hospital Jumury de Mosul (norte de Irak) tras el atentado con bomba perpetrado el pasado viernes en la periferia de la ciudad. El hospital, que recibe la asistencia de voluntarios locales de MSF desde 2007, solicitó el viernes respaldo a la organización humanitaria, que ha enviado material de emergencia para garantizar la continuidad de la atención médica, ante la posibilidad de que llegaran más víctimas.
Más concretamente, MSF envió material quirúrgico, catéteres, vías, suministro de yodo, así como vendas y apósitos, en cantidades suficientes como para asegurar la asistencia a un centenar de pacientes. Además, se han suministrado kits de atención a quemados para tratar a unas cien personas.
Debido al elevado número de pacientes en estado crítico que llegaron el viernes, el hospital había agotado gran parte de sus suministros médicos y quirúrgicos, explica Gustavo Fernández, Jefe de Misión de MSF en Irak (con base en Ammán). MSF lamenta la muerte y el sufrimiento de los civiles atrapados en esta violencia terrible e indiscriminada.
MSF respalda el Hospital de Jumury desde 2007. Además de suministrar material médico y quirúrgico, durante los últimos meses los voluntarios locales han realizado sesiones de formación del personal del hospital en cuestiones como la recepción y asistencia en situaciones de llegadas masivas de heridos.
A pesar de las dificultades a las que se enfrentan las organizaciones humanitarias presentes en Irak, MSF han desarrollado varias intervenciones en el país desde 2006, con el fin de prestar ayuda médica a la población civil, como en Anbar, Basora y en las provincias de Tameem y Nínive, principalmente proporcionando material médico y formación. En Suleimaniye, en el norte, MSF trabaja en un hospital de quemados, y ha lanzado también un proyecto de cirugía reconstructiva en Jordania.