MSF aún no ha podido hacer una evaluación exhaustiva de las necesidades, especialmente fuera de Katmandú, en zonas que solo son accesibles con helicóptero. Los equipos se están esforzando en llegar a las zonas más aisladas fuera de la capital nepalí con el objetivo de empezar la operación humanitaria lo antes posible y de acuerdo con las necesidades de las víctimas.
Las primeras evaluaciones, hechas desde el aire, muestran que los destrozos son significativos en varias aldeas de esta montañosa región. De los 65 pueblos que se pudieron avistar, 45 tenían daños visibles o habían quedado destruidos. La población necesitará artículos de higiene, utensilios para cocinar y techo.
Los artículos de primera necesidad están en camino: 1.000 kits de material de refugio, 500 kits de higiene y 500 kits de cocina llegarán por carretera a Ghorka procedentes del estado indio de Bihar.
En Katmandú la mayoría de los edificios y viviendas siguen en pie, pero mucha gente está durmiendo fuera de sus casas, en tiendas y estructuras improvisadas, ya que tienen miedo a las réplicas. Esto es un problema, ya que se esperan tormentas en los próximos días.
Un equipo evaluó la situación en dos hospitales de Katmandú (Bir y Hospital Universitario de Katmandú). Los dos han recibido heridos y necesitan suministros médicos. Los pacientes están durmiendo en tiendas frente al hospital de Bir. Según las necesidades, MSF está preparada para apoyar a la red de hospitales en la capital nepalí con suministros y recursos humanos.
En Bhaktapur (al este de Katmandú), la destrucción es visible y el hospital de la zona no tiene un quirófano operativo. Todos los pacientes están siendo trasladados a Katmandú y la población está alojándose en estructuras provisionales al aire libre. Las condiciones higiénicas son preocupantes: no hay letrinas y el agua escasea.
MSF está enviando también desde Burdeos los materiales necesarios para habilitar un hospital de campaña en Nepal.