Nuestros equipos médicos en el país han identificado ya varios casos de cólera. La gente bebe agua de los ríos y de fuentes no tratadas. Una semana después del paso del huracán Matthew por Haití, nuestros equipos siguen evaluando las áreas afectadas en la península de Tiburón y en los departamentos de Artibonite y Noroeste.
En la ciudad de Jeremie, hemos podido comprobar que el hospital de referencia ha sufrido daños importantes y cuenta con poca agua y electricidad. Además, existen algunos casos de cólera y un número significativo de supervivientes con heridas infectadas. Este pasado fin de semana, hemos llevado a cabo allí 250 consultas médicas.
En el municipio costero de Port a Piment, en el suroeste del país, la gente está bebiendo agua de fuentes no tratadas y ya se han presentado casos de cólera. Uno de nuestros equipos llevó suministros médicos a la zona y atendió a 39 pacientes con esta enfermedad.
La situación es similar en la localidad de Petite Rivière, en el departamento de Nippes, donde hemos realizado cerca de 200 consultas médicas en los últimos dos días. Bastantes personas presentan heridas en los pies fruto de las caminatas en las áreas inundadas, y mucha gente está bebiendo agua directamente del río debido a la escasez de agua potable.
Pozos y granjas dañados
Además, el equipo que viajó a los departamentos de Artibonite y Noroeste advierte que varios centros médicos y centros de tratamiento de cólera están dañados, al igual que las granjas, los pozos y las redes de distribución de agua. Aquí, la población también está recolectando agua de ríos y otros puntos de agua no tratada.
Por otra parte, estamos trabajando para llegar a las áreas más afectadas del sureste del país porque el huracán Matthew ha dañado puentes y carreteras, lo que vuelve el acceso a la zona muy difícil aún.
Durante los próximos días, estamos planeando evaluar las necesidades en las áreas montañosas cercanas.
En Haití, Médicos Sin Fronteras gestiona además varios proyectos en el área metropolitana de Puerto Príncipe: la unidad de quemados del hospital de Droulliard, el centro de urgencias y estabilización de Martissant 25, el hospital quirúrgico Nap Kenbe, el Centro de Referencia de Urgencias Obstétricas (CRUO), la clínica Pran Men’m para supervivientes de violencia sexual y de género, y el centro de tratamiento de cólera Figaro, que volverá a estar operacional en unas pocas horas. También apoyamos el Centro Diquini para pacientes de cólera.